sábado, 27 de julio de 2013

GUÍA: EL ACOSO ESCOLAR Y LA PREVENCIÓN DE LA VIOLENCIA DESDE LA FAMILIA


EL ACOSO ESCOLAR Y LA PREVENCIÓN DE LA VIOLENCIA DESDE LA FAMILIA


Comunidad de Madrid



Qué es el acoso escolar
 
El acoso escolar es un tipo específico de violencia, que se diferencia de otras conductas violentas que un alumno puede sufrir o ejercer en un determinado momento, por formar parte de un proceso con cuatro características que incrementan su gravedad:
 
1 No se limita a un acontecimiento aislado, sino que se repite y prolonga durante cierto tiempo, con el riesgo de hacerse cada vez más grave.
 
2 Se produce en una situación de desigualdad entre el acosador y la víctima, debido generalmente a que el acosador suele estar apoyado en un grupo que le sigue en su conducta violenta, mientras que la principal característica de la víctima es que está indefensa, que no puede salir por sí misma de la situación de acoso.
 
3 Se mantiene, y esto es muy importante, debido a la ignorancia o pasividad de las personas que rodean a los agresores y a las víctimas sin intervenir directamente. Puesto que de lo contrario, si intervinieran a las primeras manifestaciones de violencia, éstas no se repetirían convirtiéndose en un proceso continuado de acoso.
 
4 Suele implicar diverso tipo de conductas violentas, iniciándose generalmente con agresiones de tipo social y verbal e incluyendo después coacciones y agresiones físicas.

A continuación dejo un link para que os podáis bajar esta práctica guía de consejos contra el acoso escolar.


Montse García

 



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viernes, 19 de julio de 2013

MIEDOS INFANTILES A LOS RUIDOS FUERTES

LOS MIEDOS INFANTILES A LOS RUIDOS FUERTES


Montse García
Psicóloga col. Nº CV11233


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Todos conocemos a algunos niños pequeños que temen a los ruidos fuertes,  en concreto a los petardos, tracas, incluso a la explosión de un globo o a un portazo muy brusco. Estos niños y niñas suelen ponerse muy nerviosos, empiezan a llorar y sus reacciones negativas van en aumento si no se les aparta rápidamente del estímulo que temen. Sólo les consuela ser abrazados por algún ser querido y que les alejen de la zona donde ya no oiga los ruidos.


Los padres que tienen hijos con estos temores puede que hayan probado diferentes estrategias para que no se aterroricen cuando escuchan estos sonidos:  intentar tranquilizarles, explicarle lo que es, darle información para que sepa que no pasa nada, asegurar que sus padres le protegen por lo que no está en peligro… Pero, sin embargo,  parece que lo único que realmente le consuela es dejar de escuchar los ruidos.



Una buena manera de empezar a tranquilizarnos  y adquirir perspectiva es informarnos en primer lugar sobre los miedos más comunes que sufren los niños desde 1 año a los 8 años según la etapa evolutiva que atraviesan.



1 año: separación de los padres, ir al baño, heridas, personas extrañas.



2 años: ruidos fuertes, animales, oscuridad, separación de los padres.



3-5 años: disminuyen el miedo a la pérdida de soporte y a los extraños. Se mantienen el miedo a los ruidos fuertes, a la separación, a los animales y a la oscuridad. Aumentan el miedo al daño físico y a las personas disfrazadas.



6-8 años: disminuyen el miedo a los ruidos fuertes y a las personas disfrazadas. Se mantienen el miedo a la separación, a los animales, a la oscuridad y el daño físico. Aumentan el miedo a los seres imaginarios (brujas, fantasmas), tormentas, soledad y escuela.        



Por tanto si observamos el cuadro anterior comprobaremos que el miedo a los ruidos fuertes es evolutivo y normal en la etapa que abarca de los dos a seis años de edad. A medida que el niño crece, si la intensidad de su miedo permanece igual o se intensifica ya podemos empezar a preocuparnos por este problema. Hay que tener en cuenta que la especie humana está biológicamente preparada para aprender respuestas fóbicas a estímulos que filogenéticamente han constituido una amenaza para la supervivencia de la especie.



Así lo que nos interesa es saber si en realidad vuestro hijo o hija está sufriendo un miedo “normal” para su edad o bien la intensidad y el malestar que le producen los sonidos fuertes se puede empezar a catalogar más como una respuesta fóbica.



Digamos que el “quid” de la cuestión está en observar si la respuesta es desproporcionada en relación al estímulo. Por ejemplo una respuesta apropiada sería tenerle miedo a los leones porque el estímulo es verdaderamente peligroso, pero en cambio si se reacciona del mismo modo ante una paloma podría considerarse como fobia animal.



Asimismo es importante comprobar si la respuesta resulta desadaptada, eso es si la alta intensidad de su reacción le causa malestar, preocupación, alteraciones psicofisiológicas (temblores, náuseas, mareos, pesadillas, etc.) y conductas perturbadoras (gritos, llantos, rabietas…), que estén interfiriendo en el estilo de vida del niño o niña y estén repercutiendo negativamente en su desarrollo personal, vida familiar o en cualquier otra área.



Puede ocurrir  que los padres no sean capaces de localizar ninguna situación vivida por el niño o niña que haya “condicionado” al infante a tener miedo de estos sonidos estrepitosos y esta sensación de no tener una causa conocida aún produce más angustia en los progenitores.



Sin embargo en este sentido es bueno tener en cuenta que en ocasiones el aprendizaje de estas respuestas de temor no se adquieren solo a través de experiencias directas. Las experiencias negativas pueden ser vicarias, lo que significa que el niño o niña puede haber visto a otros, en vivo o filmados. Otro modo de adquisición es la transmisión de información amenazante, esto es muy típico en los padres, abuelos, etc. cuando avisamos a nuestros hijos de lo peligrosos que son ciertos ruidos, cosas, o animales. Por este motivo NO es aconsejable intentar disuadir a nuestros hijos “amenazándoles” con que si hacen algo que no queremos se encontrarán con el “hombre de los petardos” y cosas así.



Es útil que los padres observemos las reacciones que van teniendo los niños ante los estímulos temidos y que anotemos la frecuencia con que tienen estos miedos, si tienen alguna pesadilla relativa a los mismos, si la intensidad de sus reacciones es alta y sobre todo si consideramos que estos miedos le impiden desarrollar una vida normal. Si  la frecuencia o la intensidad le producen gran malestar es aconsejable que acudas a la consulta de un psicólogo para que pueda evaluar con exactitud este problema y aplicarle el tratamiento adecuado al niño, que en el caso de las fobias específicas son muy eficaces.



A modo de conclusión diré que aunque no es bueno extremar nuestras preocupaciones ya que los miedos evolutivos forman parte del desarrollo normal de nuestros hijos, tampoco debemos subestimar el sufrimiento de nuestros pequeños bajo la creencia de que con el tiempo todos estos problemas irán desapareciendo, por lo que considero que no hay que quitarle importancia sino informarse a través de fuentes fiables y emplear el sentido común.


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martes, 16 de julio de 2013

CUENTO PARA REFLEXIONAR: LA CASA DE LOS MIL ESPEJOS

CUENTO: LA CASA DE LOS MIL ESPEJOS

Anónimo

Pequeño cuento que invita a la reflexión y esconde una importante enseñanza.

Se dice que hace tiempo, en un pequeño y lejano pueblo,
había una casa abandonada. Cierto día, un perrito buscando refugio del sol, logró meterse por un agujero de una de las puertas de dicha casa.
 
El perrito, subió por las viejas escaleras de madera. Al terminar de subir, se topó con una puerta semiabierta; lentamente se adentró en el cuarto.  Para su sorpresa, se dió cuenta que, dentro del lugar habían 1000 perritos más observándolo tan fijamente como él los observaba a ellos.
 
El perrito, comenzó a mover la cola y a levantar sus orejas poco a poco y vio que los 1000 perritos, hacían lo mismo. 

Así, el perrito sonrió y le ladró alegremente a uno de ellos. ¡Sorpresa! ¡El perrito se alegró al ver que los 1000 perritos le sonreían y le ladraban alegremente a él!
 
Cuando el perrito salió del cuarto, se quedó pensando para sí mismo ¡Qué lugar tan agradable! ¡Vendré más seguido a visitarlo!
 
Tiempo después, otro perrito callejero, entró al mismo cuarto; pero a diferencia del primero, ese perrito, al ver a los otros 1000, se sintió amenazado, ya que lo miraron de manera agresiva. Empezó a gruñir y, claro, vio como los 1000 perritos le gruñían a él.

 
Cuando el perrito salió del cuarto, pensó: ¡Qué lugar tan horrible es este! ¡Jamás volveré a entrar aquí!
 
En el frente de dicha casa, se podía leer un letrero que decía: "La casa de los 1000 espejos".  

Montse García
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sábado, 13 de julio de 2013

NOSOTROS NOS SEPARAMOS ¿NUESTROS HIJOS TAMBIÉN?

NOSOTROS NOS SEPARAMOS ¿NUESTROS HIJOS TAMBIÉN?


Montse García


El hecho de que una pareja con hijos se separe es, indudablemente, una de las circunstancias más complicadas por las que tiene que atravesar una familia, y que inevitablemente afecta también a los hijos.


Al romper con nuestra pareja las personas perdemos una relación especial, íntima, cercana. Frecuentemente esta relación puede suponer una fuente de cariño, amor, seguridad y apoyo. Asimismo perdemos también cosas en el terrero material y económico y en el social (amigos comunes, relaciones familiares, etc.). Incluso en los casos en que las relaciones de pareja hayan sido tormentosas, sentimos una pérdida que nos produce inseguridad, inestabilidad emocional, dolor, emociones confusas y contradictorias.

Es comprensible que el estado emocional de los dos ex-cónyuges esté ahora alterado y sobre todo si la relación que existe entre ellos no es tan cordial como sería deseable. Mantener una relación de esas características puede estar influyendo negativamente en los hijos.



En estos casos es necesario hacer un ejercicio de reflexión y generosidad para hacernos conscientes de que todo aquello que podamos hacer y/o decir del otro progenitor delante de los hijos puede influir de forma importante en ellos. En mi opinión esto sería muy positivo, ya que en la medida de que cada parte se sabe una fuente de influencia para los niños será capaz de hacer que las consecuencias de la separación sean lo menos perjudiciales para ellos.

Después de la disolución de una pareja uno de los aspectos que más cuesta cambiar es el modo de relacionarse entre los ex cónyuges. En el caso en los que hay hijos de por medio los dos progenitores están condenados a entenderse aunque solo sea por el bienestar de los hijos que hay en común. El consejo más básico y más eficaz en estos casos, aunque a veces pareciera imposible de cumplir, es ANTEPONER EL BIENESTAR DE LOS HIJOS a las rencillas que se mantengan con la ex pareja.

Teniendo en cuenta este objetivo aquí van unas recomendaciones que pueden ser útiles para manejar un poco mejor esta relación:
  • Aprender a controlar las emociones, esforzarnos por escuchar a la otra parte para poder comprender la posición de tu ex pareja.
  • Practicar algún método de relajación y/o mindfulness que os ayude a canalizar las emociones negativas y aprender a gestionarlas para que un acceso de enfado no os juegue malas pasadas.

  • Otra forma de intentar mantener la calma en los momentos en que debéis tomar decisiones conjuntas es dejar de pensar en la otra parte como ex pareja, para pasar a pensar en él/ella como la persona que representa el rol de progenitor.

  • Recordar que culparse a sí mismo o culpar al otro, sin asumir la parte de responsabilidad que tiene uno mismo, no ayuda a solucionar las diferencias.
  • No se deben mostrar actitudes destructivas, hay que intentar no caer en descalificaciones ni reproches.

Aún con todo si los conflictos son de tal envergadura que  resulta imposible llegar a acuerdos, si sois conscientes de que al defender los derechos propios estáis destruyendo los del otro, o si percibís que la situación se os escapa de las manos, tal vez sea conveniente que acudáis a un profesional de la mediación para que os ayude a llegar a acuerdos a través del diálogo y la colaboración.

En relación con el tema de los hijos en principio la ruptura en sí no se considera ni buena ni mala para los hijos, lo que en realidad hace mella en ellos son las actitudes y los comportamientos alterados que muestran los padres entre sí y hacia los hijos después de la separación (insultos, menosprecios, gritos, indiferencia).

Al objeto de ayudar a los hijos a superar la separación es aconsejable tener cuenta estas cuestiones:
  • No se debe exigir a los hijos que tomen partido por uno de vosotros.
  • No se debe utilizar a los hijos como mediadores o interlocutores los miembros de la ex pareja, ni tampoco como sostén emocional de uno de los dos.
  • No tenéis que permitir tampoco que vuestros hijos se entrometan en vuestros asuntos de pareja. Estos pertenecen a vuestra intimidad.
  • No hay que manipular a los hijos para vengarse de la ex pareja, esto puede llevarles a sentirse culpables de la separación.
  • No es conveniente responsabilizar al otro progenitor de los comportamientos que puedan aparecer en los hijos (no querer dormir solos, tener pesadillas, mostrarse agresivos…). Estos actos son formas que tienen los niños de exteriorizar y afrontar los sentimientos que les producen la separación y suelen ser temporales.
  • Evitar generar en los hijos la idea de que todas las relaciones acaban mal.
  • No intentar borrar en los hijos el recuerdo del otro progenitor diciéndoles que no se quiere saber nada de ellos.
  •  Evitar crearles ilusiones de reconciliación parental.

Sobre todo insisto en que la mejor forma que tienen los progenitores de ayudar a sus hijos a adaptarse a los cambios que trae consigo la separación es realizar un esfuerzo por mostrar actitudes respetuosas. Si los hijos perciben que entre los padres hay diálogo y colaboración, y no discusiones que acaban en llantos y gritos, serán capaces de normalizar el divorcio.

Hay que ser consciente de que vuestros hijos merecen tener unos padres que, aunque estén separados, se respeten y compartan momentos en común con ellos sin contemplarse como enemigos.

Montse García




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jueves, 11 de julio de 2013

GUÍA PRÁCTICA DROGODEPENDENCIAS PARA FAMILIARES

GUÍA PRÁCTICA DROGODEPENDENCIAS PARA FAMILIARES

Editado por: ATIME 2010
Financiado por Ministerio de Sanidad y Política Social



¿QUÉ SE ENTIENDE POR DROGODEPENDENCIA?: 

Conceptos Básicos sobre Drogas.
 
Para la Organización Mundial de la Salud (OMS): “Cualquier sustancia, natural o sintética, que al consumirse puede alterar la actividad mental y física de las personas, debido a sus efectos sobre el Sistema Nervioso Central”, es una DROGA.

Por tanto se conocen como “Drogas” aquellas sustancias que reúnen las siguientes características:

-Una vez dentro de nuestro cuerpo, se dirigen a nuestro cerebro, cuyas funciones pueden ser modificadas considerablemente, tanto a nivel físico como psíquico.

-Su consumo produce los procesos de:
  •  Dependencia: Tras su uso habitual más o menos prolongado, la persona necesita consumir la sustancia de que se trate.
  •  Tolerancia: A medida que el organismo se va adaptando a la presencia regular de la sustancia, se necesita una mayor cantidad para producir los mismos efectos.

A continuación dejo un enlace desde el que se puede bajar esta interesante guía en PDF.

GUÍA PRÁCTICA DROGODEPENDENCIAS PARA FAMILIARES 

Montse García

 
 

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sábado, 6 de julio de 2013

RECOMENDACIONES PARA MEJORAR EL SUEÑO EN LOS NIÑOS


RECOMENDACIONES PARA MEJORAR EL SUEÑO EN LOS NIÑOS

Montse García


HIGIENE DEL SUEÑO Y CONTROL DE ESTÍMULOS

La higiene del sueño consiste en fomentar hábitos facilitadores del sueño y disminuir las conductas que puedan interferir en su inicio o en su mantenimiento.

En cuanto al control de estímulos se trata de fijar una serie de rutinas que sirvan como estímulo discriminativo que señale que es hora de dormir. Esto significa que poco a poco el niño asociará ciertas actividades agradables a la hora de acostarse y esto propiciará que tenga menos dificultad para ir a la cama y conciliar el sueño.

1.     Cosas a evitar:
a. Excesivo calor o ruidos en el dormitorio.
b. Bebidas estimulantes o actividades excitantes durante la tarde noche. Por ejemplo: video juegos, juegos muy estimulantes y animados, películas de acción, cuentos que contengan mucha acción o elementos que puedan causar temor al niño.

2.     Qué podemos hacer.
a.Realizar actividades relajantes ( baño, juegos relajantes, relajación centrada en la respiración) a última hora de la tarde o al inicio de la noche. Todo esto ayudará a llegar al niño relajado a la hora de acostarse. Además para el niño será muy grato tener ese momento de contacto con su mamá, su papá o su cuidador.

FACTORES AMBIENTALES

FACTORES DE LA SALUD
Evitar o reducir el ruido
Mantener unos horarios regulares, tanto de acostarse como de levantarse (incluidos días festivos)

No utilizar colores muy llamativos en la decoración de la habitación


Con niños pequeños puede leerse un cuento antes de dormir. Con los mayores se puede dedicar un tiempo a hablar de sus “preocupaciones” antes de iniciar el sueño. Esto les ayudará a controlar pensamientos esporádicos que interfieren con el inicio del sueño.

Temperatura entre 10 y 22 grados constante



Practicar ejercicio por la mañana o mediodía.

Ventilar bien la habitación

Actividades rutinarias antes de dormir (baño, cuento, etc) que nos predisponen a estar más relajados
Elegir un colchón de buena calidad
Evitar la ingesta de estimulantes

No utilizar demasiadas mantas
Algunos fármacos pueden causar insomnio


Utilizar almohadas adecuadas, no demasiado gruesas


Evitar exceso de luz

Esperar al menos dos horas después de cenar, antes de acostarse.


Evitar la luz brillante si se despierta durante la noche

Regular las siestas (mejor a primera hora de la tarde)


Evitar exceso de polvo y humedad en la habitación

Los alimentos ricos en hidratos de carbono, calcio y vitamina B , tienen propiedades sedante, por ello, son recomendables para la cena. El chocolate y el azúcar tienen el efecto contrario, utilizar con prudencia antes de acostarse.

Si el niño tiene miedo se puede dejar encendido un pequeño piloto o punto de luz tenue.

En caso de despertarse por la noche no dar de comer, sólo agua.

Es importante tener en cuenta que en este método lo más importante es instaurar una rutina que el niño pueda asumir y asociar con el momento previo de irse a la cama. Si en casa se establece un ritual de actividades (que sean agradables para el niño) en los 5 ó 10 minutos previos de que se vaya a la cama, poco a poco éste identificará estas actividades con que llega el momento de dormir. Es conveniente que el niño no se duerma realizando dichas actividades.

Por último, otra recomendación sencilla y útil es establecer con el niño alguna rutina basada en el Mindfulness (atención plena), se trata de unos métodos basados en la meditación. Yo propongo empezar  por lo más básico, la conciencia de la respiración.


Primero hay que explicarle al niño cómo hacerlo, debe sentarse en una silla, con los pies apoyados en el suelo, la espalda recta apoyada en el respaldo y los brazos a los lados en una posición cómoda. El niño tiene que dejar su mente en blanco y pensar solamente en cómo entra y sale el aire de su cuerpo. Si algún otro pensamiento irrumpe en su cabeza hay que enseñarle a que lo aparte y vuelva a pensar sólo en su respiración. Este ejercicio es más efectivo si se realiza diariamente y tendrá una duración de unos 2 minutos. ¡Sencillo verdad! , bueno pues a medio plazo se notan cambios positivos. Si se le ayuda al niño a practicar el ejercicio todas las noches antes de ir a la cama será perfecto. ¡Intentad que no se duerma mientras lo hace!



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jueves, 4 de julio de 2013

GUÍA PADRES Y MADRES: ¿QUÉ SIGNIFICA SER GAY?

¿QUÉ SIGNIFICA SER GAY? 

Enseñando valores y respeto.

Editado por: Mental Health America
Autora: Dra. Lynn Ponton (psiquiatra infantil)


Este folleto nos ayuda a plantear la manera en la que debemos hablar el tema de la homosexualidad con nuestros hijos. Según sus edades abordaremos este tema de un modo u otro intentando eliminar en lo posible los prejuicios y abriendo con nuestros hijos un canal de comunicación que los invite a hablarnos en confianza de todo aquello que les preocupa o interesa sobre este tema. 

Enseñarles valores y el respeto por ellos mismos y por los demás es la mejor forma de garantizar que estamos educando a personas íntegras con recursos sólidos para su futura adultez.

Dejo el enlace desde el que os podéis descargar este folleto.


Muy recomendable¡¡¡


Montse García



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